Dr. Roberto Betancourt A.

Inmutabilidad, en filosofía, es usualmente empleado a partir de las apreciaciones que hiciera Agustín de Hipona para establecer uno de los atributos de un Ser superior. La idea de inmutable refiere a aquello que no se encuentra sometido a la condición del tiempo, que -como podríamos anticipar- resulta ser el requisito necesario del cambio. Inalterable.

Leer permite el diálogo entre el lector y el escritor. Leer textos clásicos nos puede transportar al momento en que fue escrito y comprender el por qué de algunos eventos. Una máquina del tiempo.

Ojeando ”Meditaciones” (170 d.C.) de Marco Aurelio, o ”Encomio de la Estulticia” (1511) de Erasmo de Rotterdam podemos apreciar una segura conexión con las experiencias vivenciales, cotidianas, de hombres y mujeres de otras épocas; separados solo 15 siglos uno del otro. El comportamiento humano (o de algunos humanos) luce inmutable.

Marco Aurelio escribió “Meditaciones” ‘no hace mucho tiempo’, solo al equivalente de aproximadamente 50 generaciones. Material genético pasado de una generación a la siguiente, una especie de sustrato común de los seres humanos que Jung llamó ”Inconsciente Colectivo”. Comparando los escritos de los dos autores ¡Hay tantos lugares comunes! Los mismos antagonistas, los mismos colaboradores. Dos estilos diferentes, que enuncian los mismos padecimientos.

Sin embargo, Voltaire solía decir que “una colección de pensamientos debe ser una farmacia donde se encuentra remedio a todos los males”. Es el equivalente a escuchar el consejo de él, o el de Marco Aurelio, o los de Erasmo. La reflexión es la misma de los eruditos que apuntaban a que la mejor muestra de sabiduría es aprender de los errores de otros.

La alegoría radica en que pudiéramos ser mejores si escucháramos los gritos de quienes nos antecedieron: “Una revolución la hacen rebeldes”, recordaba José Ingenieros. El éxito como estado-nación es rebelarse ante la inmutabilidad de nuestras respuestas ante el equilibrio indiferente. La docilidad y sumisión no son atributos para el cambio. Que interesante es leer las líneas redactadas por Erasmo que -para hacerlas más interesantes aún- la Iglesia prohibió por cuatro siglos.

“Según la definición de los estoicos, si la sabiduría no es sino guiarse por la razón y, por el contrario, la estulticia dejarse llevar por el arbitrio de las pasiones, Júpiter, para que la vida humana no fuese irremediablemente triste y severa, nos dio más inclinación a las pasiones que a la razón”. Erasmo de Rotterdam.

* El autor es Presidente del Observatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación

@betancourt_phd
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