Dr. Roberto Betancourt A.
En nuestra reflexión anterior, destacamos las ventajas de contar con una sólida doctrina de medición de las actividades de Investigación y Desarrollo (I+D) en Venezuela y el aporte del Observatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Oncti), al crear una estructura para definir y medir estas variables basado en rigurosas metodologías condensadas, por vez primera en el país, en el “Manual de Caracas”.
Empero, el camino hacia la medición y la mejora eficaces no está exento de dificultades, incluyendo asegurar la exactitud e integridad de los datos recogidos, lo que demanda no solo de sistemas sofisticados de gestión de datos, sino también la participación activa y honestidad de los usuarios del Registro Venezolano de Ciencia, Tecnología e Innovación (Recitven) a la hora de proveer su información. También está el reto de mantener el sistema actualizado con los últimos avances y garantizar que siga siendo relevante y útil para todos los sectores implicados.
Adicionalmente, la interpretación de los Indicadores Clave de Desempeño presenta otra capa de complejidad, pues los tomadores de decisiones deben poseer la capacidad analítica necesaria para extraer conclusiones significativas de los datos y la previsión para aplicarlas eficazmente, incluso de las propias interpretaciones que el observatorio provee en cada nuevo volumen de análisis que comparte con la comunidad del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. Esto exige una formación y un progreso continuo de quienes participan en el análisis de datos y la planificación estratégica.
Descuidar los resultados de la medición continua puede acarrear importantes inconvenientes. Sin una comprensión clara de lo que funciona y lo que no, los esfuerzos por enriquecer las actividades de I+D pueden ser erróneos o ineficaces, dando lugar a un despilfarro de recursos, tanto en términos de tiempo como de financiamiento, y en última instancia obstaculizando el desarrollo científico y tecnológico. Además, la falta de responsabilidad y de avances cuantificables puede conducir a una degradación de los estándares y la disminución de la calidad de los resultados de I+D a lo largo del tiempo.
Finalmente, la implantación de un sistema de medición sólido como el respaldado por el Oncti es esencial para la sublimación de las actividades de I+D, coincidiendo con la filosofía de Lord Kelvin de que la definición y la medición precisas son requisitos que anticipan la mejora. Para los investigadores, proporciona un marco claro y fomenta una cultura de responsabilidad. Para los tomadores de decisiones, ofrece una perspectiva inestimable para alcanzar las metas a través de estrategias con conocimiento de causa. A pesar de este singular esfuerzo, la eficacia del sistema depende de la exactitud de la recolección de datos, de las competencias de quienes los interpretan y del compromiso con la corrección continua. Ignorar los resultados de esta medición puede dar lugar a importantes retrocesos, lo que subraya la importancia de centrarse de forma sostenida en la precisión y el perfeccionamiento en la búsqueda de la excelencia científica y tecnológica.
* El autor es Presidente del Observatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación
@betancourt_phd Fuente: https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/opinion/esfuerzos-por-mejorar-2-de-2/